Parodi Sweis, G. (2003). Relaciones entre lectura y escritura: una perspectiva cognitiva discursiva. Bases teóricas y antecedentes empíricos (2a. ed.) [Capítulo 3: Relaciones entre Comprensión y Producción de Textos Escritos, pp. 121-150]. Chile: Ediciones Universitarias de Valparaíso.
(Prof. Felisa Cortés)
Organización de la información
3.1 Introducción
3.2 Antecedentes sobre la relación entre lectura y escritura
3.2.1 Revisión preliminar
3.2.2 La conexión lectura-escritura y el concepto de lenguaje total
3.2.3 La conexión lectura-escritura y las ideas de van Dijk y Kintsch
3.3 Relaciones entre comprensión y producción textual: aportes teóricos
3.4 Tres modelos sobre las conexiones entre lectura y escritura
3.4.1 Modelo direccional
3.4.2 Modelo no-direccional
3.4.3 Modelo bidireccional
3.5 Aplicaciones de la conexión lectura-escritura
3.6 Hacia un modelo discursivo integral de la comprensión/producción
3.7 Estado actual de la conexión lectura-escritura: fortalezas y limitaciones
3.8 El futuro de la investigación sobre conexiones entre lectura y escritura
Por otra parte, el autor refiere algunos estudios que sirven como antecedentes a la investigación sobre las relaciones entre L-E (Irwin, 1992; Tierney, 1992; Stotsky, 1983; Shanahan, 1984), explicando que tales investigaciones se sustentaron teóricamente en el estructuralismo. Ello, significaba que quedaba fuera de toda consideración el paradigma sociocognitivo/textual y con él los procesos cognitivos implicados en la comprensión y producción, los entornos sociales y los discursos involucrados.
Para cerrar la sección, el autor establece relaciones entre el tópico central del capítulo y las ideas de van Dijk y Kintsch, presentando el modelo estratégico que ambos investigadores plantearon en 1983. A partir de su modelo, se plantea la hipótesis de que existen estrategias que se aplican tanto en el proceso de comprensión como en el de producción, por tanto, es imposible negar la existencia de conexiones entre ambos procesos.
3.3. Relaciones entre comprensión y producción textual: aportes teóricos. En este apartado el Dr. Parodi reseña una serie de aportes a la discusión acerca de las relaciones entre comprensión y producción textual, a partir de la década de los ochenta. Algunos de los investigadores citados son: Kucer, Nystrand, Greene y Ackerman, Squire, Spivey, Sadoski y Paivio, Reuter y Raphael y Englert. Entre las incorporaciones teóricas relevantes el autor cita lo siguiente: (a) universales cognitivos y lingüísticos; (b) operaciones constructivas; (c) procedimientos discursivos; (d) teoría de codificación dual; y (e) conocimiento de base compartido.
El autor sostiene que en la actualidad no duda de la existencia de conexiones entre producción y comprensión textual; sin embargo, los investigadores no han establecido el consenso en relación con el origen y la naturaleza de esos vínculos.
a) Modelo direccional. En este modelo se sostiene que un conocimiento que se adquiere en un dominio (lectura o escritura) puede ser transferido al otro. No obstante, esa transferencia puede ocurrir en un solo sentido. El más común de los modelos de este tipo es llamado “Leer-para-escribir”. El modelo se representa en el siguiente gráfico:
Tomado del documento de la referencia (p. 134).
b) Modelo no-direccional, señala que la L-E tienen un soporte cognitivo común para la construcción de significados y que la transferencia de información puede ocurrir en cualquier dirección. Por supuesto, en este modelo se mantiene la tesis de que un aprendizaje que se adquiere en un dominio favorece el mejoramiento del otro.
La representación gráfica es la siguiente
Modelo no-direccional
Tomado del documento de la referencia (p. 136).
c) Modelo bidireccional, se considera el más complejo y el más completo, aunque no acabado. El modelo sostiene que la L-E están constituidas por un conjunto de procesos interrelacionados que comparten un sustrato de conocimientos común, pero que los aprendizajes y, por tanto, las conexiones entre comprensión y producción, son cualitativamente diferentes en los distintos estadios evolutivos del lector/escritor.
El gráfico siguiente nos muestra su representación:
Modelo bidireccional
Tomado del documento de la referencia (p. 137).
3.6 Hacia un modelo discursivo integral de la comprensión/producción. Bajo este título el autor presenta un modelo global de la L-E, diseñado a partir de la información recabada en la exposición previa. Es así, como se considera que tal modelo debe abordarse desde una perspectiva discursiva que contemple: (a) una teoría integradora, (b) que exprese interrelaciones entre comprensión y producción, (c) con base en la bidireccionalidad e interactividad como enfoques para mostrar las interconexiones, (d) se fundamenta en el modelo estratégico-situacional de van Dijk y Kintsch y (e) que sus objetivos didácticos comprendan el aprendizaje social de los procesos de L-E, el meta-procesamiento de los tipos textuales y la práctica constante de las habilidades de L-E en asociación.
El siguiente gráfico muestra el modelo que se propone:
Modelo discursivo integral
Tomado del documento de la referencia (p. 144).
3.7 Estado actual de la conexión lectura-escritura: fortalezas y limitaciones. El Dr. Parodi afirma que el estudio de las conexiones L-E es un campo de investigación sembrado, aún, de muchas interrogantes. El autor explica que se carece de un cuerpo teórico sólido, por lo que se requiere continuar con mayor número de indagaciones.
Seguidamente, se reseñan algunos de los últimos hallazgos en el área. Entre ellos se pueden destacar los aportes de Calkins quien sostenía en 1994 que un método adecuado para el desarrollo de las conexiones entre L-E es el de los talleres de escritura. Esto último porque estaba convencida de que la transferencia ha de ser desde la escritura hacia la lectura.
Por su parte, Moore, en 1995, se inclinaba por una metodología socio-constructivista en la que los aprendizajes se desarrollan en contextos colaborativos y en medio de constantes interacciones dialógicas/recíprocas profesor/alumno. Y, el mismo Parodi, ha encontrado elementos para suponer la existencia de una competencia global de base común en los procesos de L-E.
3.8 El futuro de la investigación sobre la conexión. Para cerrar el capítulo, el autor señala un conjunto de necesidades, que espera sean satisfechas, en el campo de la investigación sobre conexiones L-E.
En cuanto a la perspectiva discursiva, Parodi expresa que aún no hay consenso en torno a que la unidad de análisis de base en el estudio del lenguaje sea el discurso. De igual manera, opina que todavía se requieren test que midan efectivamente los procesos discursivos. Respecto a la perspectiva cognitiva, es necesario identificar con precisión cuáles son los procesos cognitivos comunes en la comprensión y la producción textual.
En relación con la perspectiva interdisciplinaria, el autor aboga por una mayor colaboración entre disciplinas para poder profundizar el conocimiento de los universales compartidos y las fortalezas de los modelos de conexión señalados.
Por último y en referencia con la perspectiva instruccional, se señala la necesidad de profundizar la reflexión acerca de los métodos de enseñanza inicial de la L-E, así como en el diseño de programas integradores que restituyan la condición de la práctica social y cultural del lenguaje.